Las administraciones deben convertirse en parte de la solución a este problema y facilitar el acceso de la población a medidas y protocolos que den respuesta al deterioro de la salud mental
El deterioro de la salud mental es un problema social al que las administraciones públicas deben dar respuesta. Una de las principales medidas que proponen desde Sí Cartagena es diseñar y poner en marcha un Plan de Acción para Prevenir el Suicidio, prestando especial atención a los colectivos que mayor riesgo y vulnerabilidad presentan.
Uno de estos colectivos son los adolescentes y jóvenes. Por eso consideramos que las medidas para la prevención del suicidio y la autolisis (autolesionarse) deben “comenzar abordándose en los centros educativos de Primaria y Secundaria, poniendo en marcha campañas para su detección temprana, entrenando a los niños en habilidades sociales y consolidando estrategias en el manejo de las emociones y la resolución de conflictos”, ha explicado la secretaria general de Sí Cartagena, Ana Belén Castejón.
Del mismo modo, “exigiremos a la CARM que facilite el acceso a los servicios de salud mental, cree un dispositivo de urgencia y primera respuesta, forme a los profesionales sanitarios y no sanitarios en esta materia y, sobre todo, refuerce los equipos de salud mental para mejorar la atención a los pacientes”, ha afirmado.
La sensibilización frente a este problema tiene como finalidad crear una red de apoyo que implique a familiares, entidades, administraciones y a la sociedad civil.
Otra de las estrategias que Sí Cartagena considera que se debe abordar a la mayor brevedad es la prevención de la ludopatía. “La proliferación sin control de las aplicaciones móviles y locales de apuestas han provocado un aumento de los casos de ludopatía y una importante bajada en la edad de las personas afectadas, que se da cada vez en personas más jóvenes”, ha indicado.
En este sentido, Castejón ha continuado proponiendo “ejercer un mayor control en el cumplimiento de la normativa que impide la apertura de casas de apuestas en las inmediaciones de los centros educativos”, fomentar las campañas de concienciación contra esta enfermedad, así como las medidas que protejan a personas en situación de fragilidad, aislamiento o soledad.
Del mismo modo, la formación cartagenerista pretende acercar la salud comunitaria a las escuelas desarrollando campañas de educación en valores en las propias aulas, que fomenten la convivencia y erradiquen la xenofobia, la LGTBIfobia y el acoso escolar.
Enmarcado también en este punto está el incremento de caminos escolares seguros que permita el acceso a pie o en bicicleta a los centros educativos, incidiendo además en la prevención de la obesidad infantil.
